Los dueños e inversores en criptomonedas estaban esperando un momento clave para certificar de una vez por todas que el mundo cada vez está más preparado para las transacciones cripto. Muchos expertos financieros han comentado durante los últimos años que se necesitaba que un gobierno respaldará completamente una criptomoneda (Japón ya lo había hecho hace unos años, pero de una manera muy parcial), y esto ha sucedido hace apenas unas semanas con la entrada del bitcoin como moneda oficial en El Salvador.

Tras una apuesta arriesgada del gobierno de Nayib Bukele, desde el 7 de septiembre de 2021 todos los comercios del país deben aceptar bitcoin como método de pago; por lo que la criptomoneda más importante del mundo se convierte, junto al dólar, en moneda oficial de El Salvador.

En la actualidad, los salvadoreños ya pueden elegir entre pagar sus compras en dólares y en bitcoins. Asimismo, no hay ninguna obligación para que la población salvadoreña transforme sus ahorros a bitcoin, ya que se pueden mantener cuentas bancarias en dólares como se venía haciendo hasta ahora.

¿Por qué hay tanto escepticismo con esta revolucionaria medida financiera?

Al ser la primera vez en que un país permita convivir de igual a igual a su moneda oficial con una criptomoneda (que también se convierte en divisa oficial), hay una gran incertidumbre sobre lo que muchas personas califican de experimento.

A nivel internacional, esta medida de El Salvador ha sido recibida con mucho escepticismo y falta de apoyo, especialmente por los siguientes motivos:

  • En primer lugar, estamos hablando de una criptomoneda y no es ningún secreto que estos activos digitales son extremadamente volátiles. Por ejemplo, si en diciembre de 2020 el bitcoin superó por primera vez la barrera de los 20,000 USD, cuatro meses después superó la barrera de los 60,000 USD; sin embargo, después comenzó a desplomarse.

    Este tipo de cambios drásticos no ocurren con las divisas fiduciarias, por lo que un país que base la mayor parte de su economía en las criptomonedas, puede estar demasiado expuesto a variables que están fuera de su alcance y no puede regular.

  • El Salvador se encuentra entre la lista de los países más pobres de la región y desafortunadamente el conocimiento financiero específico sobre criptomonedas es bastante limitado para la mayor parte de la población. Este desconocimiento puede crear decisiones desafortunadas a la hora de tomar decisión de inversión, ahorro o consumo.
  • El hecho de aceptar al bitcoin como moneda oficial no ha sido muy bien recibido por la población en general, ya que el salvadoreño de ‘a pie está totalmente dolarizado’ y no confía en una moneda no tangible. Muchos salvadoreños entienden que esta medida se ha tomado teniendo más en cuenta a las grandes economías e inversores internacionales, que al propio ciudadano.
  • También hay que tener en cuenta que la mayor parte de la población gobernada por Nayib Bukele no tiene acceso a internet de manera constante, con lo que esto supone otra dificultad adicional a la aceptación generalizada del bitcoin como método de pago. El 45% de la población tiene acceso a internet y en el mundo rural este porcentaje disminuye hasta el 10%.
  • Por último, uno de los problemas de no contar con moneda propia, es depender de otras economías. El gobierno de El Salvador tiene experiencia en este tema, ya que desde que adoptó el dólar estadounidense como moneda oficial, perdió su soberanía monetaria. Sin embargo, ahora el país centroamericano no solo dependerá de los vaivenes del dólar, sino que también tendrá que estar muy atento a las fluctuaciones relacionadas con el bitcoin y el mundo de las criptomonedas en general.

¿Por qué El Salvador oficializa el Bitcoin?

El gobierno salvadoreño está totalmente convencido que la inclusión del bitcoin como moneda oficial puede ofrecer la estabilidad económica que lleva buscando el país durante muchos años; además de dar un paso al frente a nivel internacional al aceptar la importancia mundial del bitcoin y resto de criptomonedas.

En una de sus últimas declaraciones, el presidente salvadoreño comenta estar encantado con el hecho de que más de 2 millones de salvadoreños hayan descargado su Wallet personal Chivo, desde donde pueden gestionar sus activos digitales para hacer compras.

Para incentivar el uso de Chivo y la nueva moneda oficial, cada salvadoreño que descargue el monedero digital, recibirá 30$ en bitcoin. Para empezar, El Salvador ya ha comprado 200 bitcoins y se espera que según se vaya popularizando este método de pago y se cumpla con las expectativas previstas, el gobierno seguirá comprando más bitcoins.

Nayib Bukele pretende con esta iniciativa que los salvadoreños ahorren dinero en las remesas que reciben de otros países (principalmente EE.UU.) y que algunas ocasiones puede llegar hasta el 30% del dinero que se envía. Hay que recordar que las remesas suponen el 16% del Producto Interior Bruto de El Salvador. De hecho, en 2020, el país centroamericano recibió cerca de 6,000 millones de dólares en remesas.